Izaro Elorza: «La sostenibilidad y lo social son líneas que hemos abordado con especial convicción en los últimos años»
12-01-2022
La alcaldesa de Oñati tiene clara la importancia de buscar sinergias con el resto de colectivos y pueblos para anticiparse a los retos. Por eso cree en la misión de la D2030.
El Ayuntamiento de Oñati asume el reto de construir un pueblo sostenible e inclusivo. También es miembro de la red D2030 a nivel regional que comparte estos objetivos, consciente de que estos retos superan la escala local.
¿Por qué el Ayuntamiento de Oñati forma parte de la iniciativa?
Debagoiena 2030 es una iniciativa alineada con nuestros objetivos. En definitiva, tenemos que abordar retos de gran calado. De cara al futuro, tanto a medio como a largo plazo, habrá grandes cambios en la sociedad y en el mundo en general. Tenemos que estar preparados para lo que viene, en la medida de lo posible, anticipándonos a estos retos. Para ello, es fundamental buscar sinergias con el resto de colectivos y pueblos. La red de sostenibilidad Debagoiena 2030 contribuye a ello.
El Ayuntamiento de Oñati apuesta por un pueblo inclusivo y sostenible. ¿En qué se traduce eso?
Así es. En los últimos años, trabajamos estas líneas con especial convicción. No se trata de un cambio de un día para otro, sino de un cambio progresibo. Y, cómo no, para que la teoría se convierta en práctica, es fundamental incidir desde todos los ámbitos; medioambiental, social… Por eso, tenemos en marcha, El Plan de Turismo sostenible e inclusivo, el Plan de Comercio, el II. Plan de Igualdad, Onaro, generación de energías renovables, la recogida de residuios puerta a puerta, la rehabilitación de Natur Eskola, el alojamiento en Araotz, las subvenciones a agricultores y ganaderos locales, las inversiones en bidegorris y transportes públicos…
En un momento en el que el modelo energético está en boca de todos, el proyecto de Oñatiko Urjauziak se ha convertido en la identidad del pueblo. ¿Cuál es el valor del proyecto en este contexto?
Oñati tiene una base sólida. No sólo en la creación, sino también en la distribución y la comercialización. El proyecto Urjauziak tiene un gran valor. Pero hay que reconocer que, aunque hoy en día es capaz de generar las necesidades energéticas anuales de los oñatiarras, en un futuro habrá que incorporar otros sistemas energéticos. En este sentido, seguimos de cerca los nuevos proyectos que están surgiendo en la actualidad.
Eres alcaldesa de Oñati, pero ¿te parece importante trabajar a escala regional? ¿Por qué?
Sí. En definitiva, el Ayuntamiento es capaz de dar una respuesta adecuada a algunas de las preocupaciones y necesidades de la ciudadanía, pero en otros casos es necesario actuar de forma colectiva. Hay problemas, retos que se comparten entre los pueblos… Abordándolos colectivamente, la respuesta será más eficaz.
¿Crees que la ciudadanía ha empezado a asumir esa necesidad de afrontar los retos del futuro?
Se puede decir que una amplia mayoría está de acuerdo con la teoría. Sin embargo, estos retos implican cambios en la vida cotidiana. Ahí, el cambio no pasa de un día para otro. Es un tema a tratar. Y si lo trabajamos, se notarán sus frutos. Iniciativas, acciones y cambios concretos nos conducirán a la toma de conciencia de la realidad, lo que supondrá la implicación de gran parte de la sociedad. Es un cambio por fases.
¿Qué puede ofrecer el Ayuntamiento de Oñati a la iniciativa D2030 y viceversa?
D2030 nos ofrece la posibilidad de encontrar y aprovechar sinergias. En este sentido, el Ayuntamiento de Oñati puede compartir proyectos, reflexiones, estudios, recursos… puestos en marcha a nivel local con la red de sostenibilidad. Y D2030, a cambio, puede ofrecer nuevas perspectivas de hacer las cosas, crear nuevas relaciones, construir un espacio de unión de fuerzas…
D2030 también trabaja con la cooperación y la gobernanza colaborativa. ¿Qué importancia tienen en esta obligación de responder a los retos globales desde lo local?
Trabajamos en colectivo buscando dar respuesta local a los retos mundiales, buscando y encontrando sinergias. Y ahí la gobernanza tiene una importancia especial. No podemos olvidar que D2030 integra a participantes de carácter diverso -entidades, asociaciones, cooperativas… -, por lo que para la trayectoria a largo plazo de la red de sostenibilidad es fundamental construir un modelo de gobernanza adecuado. La experiencia es nueva, el modelo de gobernanza está sin construir. Eso nos crea nuevas oportunidades.
¿Qué importancia tendrán D2030 y este tipo de proyectos en adelante?
Estamos inmersos en una experiencia que hasta ahora no había sido habitual. Contamos con entidades de diverso carácter que quieren dar una respuesta adecuada a los retos globales del futuro desde el punto de vista local. No es una tarea floja. A la vista de los retos que se avecinan, se puede pensar que este tipo de redes serán cada vez más habituales. Por lo tanto, se puede decir que para los pasos posteriores estos primeros serán también de gran significado.
Esta entrevista es una traducción de la publicación de Goiena.eus.
